El Palacio sumergido aparece como casa del Callejón del Cangrejo. Es un castillo totalmente sumergido en el agua que nos permitirá ir buceando cuando nos movamos por él. Este castillo dispone de 250 huecos dentro para decorarlo como queramos y de 250 huecos fuera para crear un jardín acuático único. Para obtenerla, tendremos que ir a la tienda de coronas y comprarla, pero no siempre está disponible. Ahora vamos a ver las diferentes partes de esta maravillosa casa y a explicarlas en detalle:
El lugar de llegada nos impactará mucho, ya que nos encontraremos bajo el agua buceando para movernos. Encontraremos una rampa delante para bajar hacia el edificio principal y explorar el resto de la casa. A nuestra izquierda encontraremos una gruta con una cámara un poco más amplia perfecta para un jardín.
En un lateral de las afueras tenemos un barco hundido para jugar con nuestros amigos, además de un pequeño cofre del tesoro. Es el lugar perfecto para una decoración de objetos acuáticos.
En esta espectacular vista frontal vemos el edificio principal de la casa, con uno de sus balcones a la izquierda y el puente levadizo de la entrada bajado.
La entrada luce tan fantástica como vemos en la imagen, con la luz marina entrando por las ventanas y una primera visión de agua filtrada. Un techo alto nos permitirá poner los objetos que queramos.
En la parte derecha del salón principal tenemos una zona seca en la casa, con unas bonitas escaleras coronadas de una lámpara a juego. Estas escaleras dan acceso a un primer piso, con un pasillo con una barandilla desde donde veremos el salón y una habitación al fondo del pasillo.
Este es el salón principal de la casa, con dos cascadas cayendo en él. La de la izquierda nos lleva a unas escaleras para subir a la parte más alta del castillo. Al fondo vemos un pasillo techado y con unas elegantes columnas con arcos, con la segunda cascada cubriendo parte de los mismos. En la parte superior de la imagen vemos el pasillo con barandilla y un balcón en la parte izquierda.
Esta es la parte más alta del castillo, donde vemos una vía de agua que permite que las escaleras parezcan un río. Desde aquí podemos acceder a un balcón que nos permite ver nuestra casa a vista de pájaro.
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